Abrazos y más abrazos. Alegría, euforia y llanto. Emoción a flor de piel. Las sensaciones del equipo de Flavio Orsi y Sergio Gómez. En los ochenta Platense era el “fantasma del descenso” ya que siempre se salvaba de perder la categoría. Hoy es el “mata gigantes” porque venció en fila a Racing, a River (por penales) y a San Lorenzo. Con el plus de lograrlo como visitante. El partido estuvo claro desde el principio. Un San Lorenzo con mayor responsabilidad por ser local pero, jaqueado por su crisis económica y la posible salida de su DT a Boca. Platense con su juego duro, físico con pinceladas de Taborda y Maneiro. A los 3 minutos probó con un tiro de Ronaldo Martinez que atrapó en dos tiempos el arquero Gil. A los 30 una chilena de Martinez pasó cerca del travesaño. Cerca del final Gil contuvo un remate de Lotti. San Lorenzo solo arribó peligro con un cabezazo de Vombergar. El segundo tiempo mostró a un San Lorenzo en busca de la victoria. A los 19 tuvo la más clara. A la salida de un córner entre Muniain y Reali armaron una gran jugada que fue salvada por Saborido. A los 28 Platense dió el golpe. Una mala salida de Gil luego de un córner fue capitalizada por Franco Zapiola para poner al Calamar en ventaja. San Lorenzo a los 40 tuvo el empate pero, el remate de Alexis Cuello fue atrapado por el arquero Cozzani. El final del juego marcó la victoria de Platense. Ahora el próximo domingo desde las 17 horas en el Madre de Ciudades de Santiago del Estero y frente a Huracán buscará ser campeón por primera vez en su historia.